¿Qué fue la "Logia Lautaro"?
20/11/2025. Análisis y Reflexiones > Análisis y Reflexiones
Probablemente uno de los autores más eruditos en el tema haya sido Juan Canter 1, quien afirma que a partir de 1804 las asociaciones revolucionarias que se fundaron en Buenos Aires, tuvieron inspiración madrileña
Por Abel Cornejo
Probablemente uno de los autores más eruditos en el tema haya sido Juan Canter 1, quien afirma que a partir de 1804 las asociaciones revolucionarias que se fundaron en Buenos Aires, tuvieron inspiración madrileña y confluyeron en el Club y la Sociedad Patriótica, entidades que a su vez fueron absorbidas por la Logia Lautaro. La primera logia instalada en Buenos Aires se llamó: San Juan de Jerusalén de la felicidad en esta parte de América
A su vez ésta incorporó otras reuniones más y fue la que encauzó la Revolución de Mayo, sometiéndola a un plan y a un programa, cumpliendo así un imperativo histórico del momento. La Logia, dice Canter, dio la sinergia coordinadora y por dichos motivos gravitó tan intensamente en los destinos de América del Sud, porque fue la sociedad secreta más perfeccionada y reguladora de la política de su tiempo. Duró alrededor de quince años, hasta que languideció y sus derivaciones dieron origen a la denominada Logia Provincial de Buenos Aires y más tarde la Logia unitaria.
No fue sereno el decurso de la Logia Lautaro, en su seno hubo posiciones encontradas y según sus exteriorizaciones a veces se la llamó así y otras Logia Ministerial. El concepto de estas sociedades secretas difiere según el autor que las trate. El Café de Marco y la Jabonería de Hipólito Vieytes, eran dos de los lugares donde los prosélitos se reunían
Por ejemplo, Bernardo Frías, dice que a principios de 1812 habían llegado de España don José de San Martín y Carlos María de Alvear, con otros conmilitones. Venían desde Europa con el propósito de dar vigor y una solución rápida al problema de la revolución de América, asegurando la independencia y el sistema republicano; para lo cual estaban secretamente unidos y trataron de establecer en Alvear y San Martín la institución de las sociedades secretas y juramentadas, de tanta actividad entonces en Europa, las cuales, sin embargo, sólo pueden hallar justificación en las naciones oprimidas. Llegados Buenos Aires, fundaron la liga, incorporando a su seno, como a filiados, a buen número de personajes civiles y militares. Su objeto primordial era trabajar por la independencia y consideraron como medios indispensables para conquistarla, apoderarse del gobierno de las Provincias Unidas, entregarlo a manos de la sociedad formada por ellos y constituirla en único arbitro de los destinos de la sociedad. En aquel cenáculo tenebroso – dice Frías de la Logia Lautaro – era donde irían en lo sucesivo a resolverse y decidirse todos los cambios de gobierno, el nombramiento de embajadores, la designación de gobernadores de provincias, las jefaturas militares, etc. 2 . Tal era el concepto del egregio historiador salteño, al considerarla un cenáculo tenebroso.
La Logia no sólo tuvo influencia en las Provincias Unidas, sino también en Chile y Perú. El libertador chileno Bernardo O’Higgins, por dar un caso, fue un conspicuo adherente a dicha sociedad. Y el operador más importante y determinante en la política que debía llevar a cabo el Ejército de los Andes una vez independizados dichos países, fue Bernardo de Monteagudo.
El predominio lautarino se extendió fuertemente desde la asonada del 8 de octubre de 1812, cuando se produce la caída del primer Triunvirato, hasta que se disuelve el Directorio con la llamada Anarquía del año 20. Durante esos ocho años, su supremacía fue total, en Buenos Aires.
En Chile y Perú se extendió por varios años más. San Martín y Alvear no tuvieron influencia española, sino que San Martín integró la llamada Logia de Cádiz, que a su vez era tributaria de la Logia Gran Reunión Americana o Logia de los Caballeros Racionales, fundada por el prócer venezolano Francisco de Miranda en Londres en 1798. Tanta fue la influencia intelectual de Miranda en los libertadores sudamericanos, que, en una correspondencia escrita de su puño y letra, Bernardo O’Higgins dice que en 1798 fue el caraqueño quien le inculcó fundamentalmente la idea de independencia. La idea central de Miranda giraba en torno a crear un nuevo imperio incaico con un gobierno federativo formando un estado único e indivisible. Si nos detenemos en este punto, observamos que esa moción la realizó Manuel Belgrano en el pleno del Congreso de Tucumán previo a la Declaración de la Independencia y a su vez Simón Bolívar, quien rompería relaciones con Miranda, aspiraba a la unión americana. Ese fue el espíritu del congreso que convocó en 1826.
Juan Martín de Pueyrredón el coronel salteño José de Moldes también fueron adherentes a la Logia, aunque luego quedaran ferozmente enemistados La Logia que en su interior se llamaba a sí misma Sociedad de los Caballeros Racionales quedó descripto en una frase de Alvear donde explica que su denominación se debía a que no hay nada más racional que velar por la Patria y sus paisanos. Como bien lo enseña Caner, la Logia es uno de los temas más atrayentes de la historia argentina y su estudio demandaría un trabajo mucho más extenso, pero esa ya es otra historia
1 Academia Nacional de la Historia, Historia de la Nación Argentina, Librería y Editorial El Ateneo, Bs.As., 1941, Vol V., primera sección, pags.189 y ss.
2 Historia del general Martín Güemes y de la provincia de Salta o sea de la Independencia Argentina, Depalma, Bs.As. 1972, Tomo III, pág. 161
Fuente de la Información: El Once TV