Los Gorriti: una familia patriota
05/11/2025. Análisis y Reflexiones > Análisis y Reflexiones
La familia Gorriti que alcanzaría honor en gloria en la Guerra de la Independencia fue fundada por el vasco Ignacio de Gorriti y Feliciana Cueto, que había nacido en Jujuy.
Un hermano de Ignacio, de nombre Francisco, en la época colonial sirvió heroicamente a las tropas españolas en defensa de Montevideo ante el asedio portugués a principios del siglo XVIII. Por este Gorriti guerrero es que se denominó Isla Gorriti al promontorio que se encuentra frente al balneario uruguayo de Punta del Este. Francisco de Gorriti sería el padrino de quien fuese el célebre capitán gaucho y menor de los tres hermanos José Francisco Gorriti, el famoso “Pachi” probablemente uno de los lugartenientes predilectos de Martín Miguel de Güemes. Ahora bien, de la unión de don Ignacio y Feliciana Cueto nacerían tres hijos varones. Los tres se destacarán.
El mayor fue el canónigo Juan Ignacio Gorriti, quien bendijera la bandera nacional en la iglesia matriz de Jujuy, sostenida por Manuel Belgrano, el 25 mayo de 1812, momento que fue inmortalizado en el óleo que pintara Luigi De Servi (1863-1945). El canónigo Gorriti nació en la localidad Horcones, en el actual departamento de Rosario de la Frontera, el 10 de junio de 1766. Fue miembro de la Junta Grande de Gobierno en 1811 y del Congreso Constituyente de 1825. Fue el único sacerdote que fue gobernador de Salta entre el 1° de marzo de 1829 y el 26 de diciembre de 1830. Estudió en la Universidad de Córdoba, donde se doctoró en Teología en 1791 y se ordenó sacerdote. Su primer curato fue en los pueblos puneños de Casabindo y Cochinoca, y posteriormente vicario de la iglesia matriz de Jujuy. Fue famoso por su versación y oratoria y se opuso férreamente a la elección de Güemes como gobernador de Salta. Fue el único de los tres hermanos que nunca adhirió al caudillo. A la par de ello fue expulsado de Buenos Aires, cuando integró la Junta Grande por ser absolutamente contrario a la primacía centralista porteña. Como había adherido al partido de la Unión, popularmente conocido como unitario, luego de la derrota de Ciudadela firmó un tratado de paz con los representantes de Facundo Quiroga y debió emigrar a Bolivia. Radicado primero en Cochabamba, escribió Memoria y Autobiografía y Reflexiones sobre las Causas Morales de las Convulsiones de los Estados Americanos. Murió en Sucre, el 25 de mayo de 1842.
El segundo de los hermanos fue José Ignacio de Gorriti, quien además de sus eximias dotes políticas, fue un abnegado militar, volcado a la carrera de las armas por la firmeza de sus convicciones en que debía fundarse una nueva nación; es uno de los próceres más destacados de la historia de Salta y la región y el más influyente, junto a Macacha Güemes, de Martín Miguel de Güemes. Nació en San Salvador de Jujuy, un 30 de julio de 1770. Cursó sus primeros grados en la orden Terciaria Franciscana y a los 12 años fue enviado a la ciudad de Córdoba donde se educó en el colegio de Montserrat. Cuando egresó partió a estudiar derecho a la Universidad de San Francisco Xavier de Chuquisaca en 1788, que era por entonces el faro cultural sudamericano. Un año más tarde, el 20 de junio de 1789 se recibió de bachiller, licenciado y doctor en cánones. La familia Gorriti había amasado una fortuna considerable labrada por su padre y si bien recibió numerosos ofrecimientos para ejercer el derecho en Chuquisaca debió retornar y hacerse cargo del establecimiento rural que poseían en Horcones, llamado Miraflores. En la sala del campo tuvo una de las bibliotecas más pobladas que se recuerde. En 1802 contrajo matrimonio con Feliciana Zuviría, hermana de Facundo, de cuya unión nació la célebre escritora Juana Manuela Gorriti, que es la única persona que describió y escribió cómo era el rostro de Martín Miguel de Güemes. Contribuyó económicamente con las fuerzas que fueron enviadas a combatir en las invasiones Inglesas de 1806 y 1807.
Cuando se enteró de la Invasión Napoleónica a España, comenzó a reunirse con Pedro Antonio Arias Velásquez y adhirió fervientemente a las ideas revolucionarias. Tuvo una fluida correspondencia con el síndico procurador del Cabildo de Buenos Aires, Julián de Leyva a a tales efectos. Junto con los hermanos José y Eustaquio Moldes y Francisco y José de Gurruchaga fueron los precursores en Salta de la Revolución de Mayo. Primero formó un pequeño ejército llamado Partida de Baqueanos, luego los denominó Partida de Decididos y entabló conversaciones con Martín Miguel de Güemes a quien se subordinó a partir del regreso del Héroe Gaucho en 1814, secundándolo hasta su muerte. Gorriti no sólo dejó su profesión de abogado y de hacendado próspero, sino que directamente se convirtió en un hombre de armas. Previamente se había distinguido en el combate de las piedras al hostilizar a las fuerzas españolas de Pío Tristán en las vísperas de la Batalla de Tucumán en 1812 y entonces fue ganando un amplio reconocimiento popular. Ya en plena Guerra Gaucha fue el precursor junto a Macacha Güemes del pacto de los Cerrillos y diputado por Salta al Congreso de Tucumán en 1816. Cuando dicho Congreso decidió mudarse a Buenos Aires en 1817, prefirió volver a Salta para combatir con denuedo en la Tercera Invasión realista, comandada por el mariscal José de la Serna. Uno de los episodios bélicos más importantes de la Historia Argentina según Dalmacio Vélez Sarsfield.
Fue constituyente por Salta en la sanción de la Constitución de 1819. A Gorriti no sólo le tocó asistir al momento cúlmine de la muerte del caudillo, sino intervenir en los sucesivos desórdenes políticos que se generaron posteriormente al 17 de junio de 1821. Güemes había sido sepultado en la iglesia de El Chamical, y como Gorriti había asumido la gobernación mandó a que sus restos fueron conducidos en procesión el 14 de noviembre de 1822, tributándoles todos los honores postergados y luego de una capilla ardiente de dos días se lo inhumara por segunda vez en la cripta de la vieja Iglesia Matriz, entonces ubicada en las actuales Caseros y Mitre. Tuvo una célebre reunión con el militar español Baldomero Espartero y el general Juan Gregorio Las Heras para intentar llegar a un armisticio antes de la Batalla de Ayacucho. Gobernó Salta tres veces y merced a las luchas entre unitarios y federales debió exiliarse a Bolivia donde murió en la pobreza el 9 de noviembre de 1835. Es el único de los tres hermanos cuyos restos permanecen fuera de Salta.
José Francisco “Pachi” Gorriti, el menor de los hermanos, nació en Jujuy el 20 de abril de 1780. A los 17 años el Pachi gorriti ingresó a la orden Erciaria Franciscana, pero enseguida abandonó los hábitos y regresó a Salta. Allí trabajó en los establecimientos agropecuarios de su familia Ortega y Miraflores, y se convirtió en un eximio jinete. Como el representante comercial de la familia Gorriti en Montevideo, era nada menos que José Gervasio de Artigas, el Pachi entabló una fraternal amistad con el Protector de los Pueblos Libres, y desde entonces simpatizó y adhirió a la causa federal. De allí que Pachi, quien fue el guerrero más apreciado por Martín Güemes, es quien seguramente haya intercedido para que el caudillo oriental le enviase al caudillo salteño una carta amistosa para que uniesen fuerzas y que Güemes nunca pudo responder porque lo mataron. Al igual que sus hermanos mayores adhirió a la Revolución de mayo y fue un eficaz colaborador de Manuel Belgrano en el Exodo Jujeño. Combatió en las Piedras y cuando Güemes retornó a Salta en compañía de San Martín ene enero de 1814, ya era considerado el mejor lancero de la región. Allí se unió a las huestes gauchas.
El Pachi Gorriti, a su vez era íntimo amigo de los cuñados del Güemes, Dionisio y Manuel Puch y su valor en combate fue tal, que el propio caudillo salteño lo consideró temerario. Estuvo al lado del prócer en su agonía y por su ideario federal tuvo algunas diferencias con sus hermanos, sin que se quebrase jamás el vínculo fraterno. Tuvo la particularidad de que a raíz de una promesa desconocida combatía con el sayal franciscano. Fue amigo de los caudillos federales, Juan Bautista Bustos, Juan Felipe Ibarra y Estanislao López. Muerto Güemes, le continuó siendo fiel políticamente a Macacha y participó del derrocamiento del general Arenales como gobernador de Salta, el 1° de enero de 1824 en la Batalla de Chicoana. Como a continuación de este episodio fue electo su hermano José Ignacio de simpatías unitarias, se recluyó en sus trabajos de campo hasta su muerte, acaecida en Salta el 1° de octubre de 1830. Sus restos fueron inhumados en la Basílica Menor de San Francisco. Tanto Pachi como José Ignacio Gorriti son dos patriotas, que a diferencia de su hermano el presbítero Juan Ignacio, han sido olvidados por la historia y su reivindicación es una asignatura pendiente e irrenunciable de la historia nacional. El retrato al óleo de José Ignacio Gorriti se encuentra en el hemiciclo de la Legislatura de Salta, vestido de uniforme militar.