Condenan a una joven de 20 años por tráfico de drogas
12/12/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Oriunda de La Rioja, la joven fue detenida en marzo, junto a un hombre, con 30 paquetes de cocaína ocultos en el tanque de nafta de un vehículo. Decía ser comerciante, pero llevaba 25 kilos de cocaína
El Tribunal Oral Federal N°1 de Salta condenó a 6 años de prisión a una joven de 20 años que decía ser comerciante de ropa, pero en marzo pasado fue detenida en un control vehicular junto a un hombre cuando transportaban 25 kilos de cocaína ocultos en el tanque de combustible del automóvil en el que viajaban.
En línea con lo solicitado por la fiscal subrogante Paula Gallo, las juezas Gabriela Catalano y Marta Snopek y el juez Marcelo Juárez Almaraz consideraron a Candela Ayelén Aguirre coautora del delito de transporte de estupefacientes agravado por el número de intervinientes.
En la sentencia -dada a conocer el 28 de noviembre pasado- el tribunal dispuso también el decomiso en favor del Estado nacional del automóvil, marca Chevrolet modelo Cruze, utilizado para el transporte de la cocaína.
La condena de Aguirre se suma a la de su cómplice Gastón Gabriel Garino, quien en julio pasado recibió una pena de 3 años de prisión en suspenso por el mismo delito en el marco de un acuerdo de juicio abreviado.
La investigación penal por el mismo delito aún se encuentra en trámite debido a la detención de un tercer implicado, identificado por sus iniciales como R. C., en agosto, en la localidad de Caucete, en la provincia de San Juan, en un control llevado a cabo por Gendarmería Nacional.
Aguirre y Garino fueron detenidos el 9 de marzo, en la ruta nacional 68, a la altura de la ciudad de Cafayate. En un control de rutina, Gendarmería Nacional detuvo al automóvil Chevrolet Cruze que era conducido por Garino, mientras que Aguirre iba como acompañante. Dijeron que provenían de Orán e iban a la provincia de La Rioja.
A los gendarmes les llamó la atención que ninguno de los dos ocupantes era dueño del vehículo, y además hubo aspectos del tanque de combustible que les generaron sospechas. En una requisa más profunda descubrieron 30 paquetes de cocaína ocultos en su interior.
La fiscalía explicó que se trataba de 25 kilos, con una pureza de más del 70%, equivalente a 176.507,66 dosis, lo que representaba un grave riesgo a la salud pública.
Al momento de los alegatos, la fiscalía concluyó que se tenía por acreditada la responsabilidad de Aguirre. Resaltó los viajes a la frontera, con una frecuencia promedio de semana de por medio, en febrero y marzo.
Asimismo, señaló que la joven llegó a tener activas siete líneas telefónicas, una de ellas con característica de la localidad de Aguas Blancas, en el límite con Bolivia, cuando su supuesta actividad comercial y de vida era en La Rioja. Además, tenía un aparato para cada uno de esos números y, al ser detenida, manipulaba un iPhone, cuyo patrón de desbloqueo no quiso aportar.
En ese sentido la fiscal recordó que un analista en comunicaciones dijo que el cambio de línea estaba siempre vinculado directamente con algún viaje hacia el norte del país. También se pudo establecer que el auto usado para ocultar la droga fue adquirido días antes, a partir de una operación en la cual la joven entregó un vehículo Volkswagen Fox de su propiedad.
En cuanto a que los viajes eran para comprar ropa, la fiscalía lo descartó y reveló que en el auto no se encontró prenda alguna. “Ella no registra ninguna actividad laboral, ninguna cuenta bancaria, esto también llama la atención respecto a cómo pudo adquirir el vehículo VW Fox”, resaltó la fiscal Gallo.
También se refirió a su juventud. “La acusada es mayor de edad, tiene plenamente todo su discernimiento”. “No deja de ser una persona joven, pero eso no la exime de responsabilidad y todos estos elementos que se han recolectado en la investigación y se han producido en este juicio dan cuenta de su participación”, afirmó.
En ese mismo tono, los jueces dijeron que, si bien la joven no registra antecedentes penales, es “una mujer de 20 años de edad” que “conoce acabadamente la peligrosidad y lo malo de su conducta”. No obstante, consideraron que su juventud “juega como un elemento atenuante”.
Fuente de la Información: Página 12