Una sesión escandalosa que rompió puentes y pone en peligro la designación de Rafecas
28/02/2020. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
La sesión de ayer en la Cámara de Diputados marcó un punto de inflexión en la relación, hasta ahora de respetuosa convivencia, entre la oposición y el oficialismo. "Quedó afectada", se sinceraba anoche un encumbrado miembro de Juntos por el Camb
Desde el oficialismo minimizan la situación. "La oposición armó un circo para zafar de un debate que lo incomodaba. Hicieron su juego: nos acusaron de avasallar a la Justicia, hicieron el escándalo y evitaron quedar pegados con los privilegios de los jueces", deslizó un hombre de estrecha confianza del presidente Alberto Fernández. En el Frente de Todos entienden que el entredicho quedará superado con el paso de los días y buscarán dar vuelta la hoja para seguir adelante con la agenda legislativa. Pero lo cierto es que los distintos sectores de la oposición, y no sólo Juntos por el Cambio -el espacio opositor más numeroso-, ya no se mostrarán tan "solidarios" (un término que al presidente Fernández le gusta repetir) a la hora de dar quorum y negociar las futuras leyes como hasta ahora.
El oficialismo intenta no mostrarse preocupado por la situación. Con mayoría en el Senado, confía en que con el aporte de los bloques aliados en la Cámara de Diputados podrá imponer su agenda, como lo hizo ayer al apurar, en un debate exprés, el proyecto que recorta las llamadas "jubilaciones de privilegio". Pero este exceso de confianza tiene patas cortas y le podría provocar complicaciones en el futuro cercano al Frente de Todos. Sin ir más lejos, está pendiente en el Senado la designación del juez federal Daniel Rafecas como Procurador General de la Nación. El oficialismo necesitará los dos tercios de los senadores presentes en el recinto para aprobar el nombramiento, por lo que los votos de Juntos por el Cambio se tornarán imprescindibles.
"Con lo que pasó ayer en la Cámara de Diputados, que se olviden de Rafecas", sentenció ayer un importante miembro de la conducción del radicalismo.
La agenda del oficialismo, además de la designación de Rafecas, continuará con otros temas igualmente complejos, como la reforma de la Justicia Federal -el Presidente presentará el proyecto en los próximos días-, la renegociación de la deuda con los acreedores externos y el presupuesto 2020, que se daría a conocer a fines del mes próximo. Frente a este panorama, el oficialismo tiene dos alternativas: avanzar en los proyectos sin negociar con el principal bloque opositor o bien, como se propuso Sergio Massa, presidente de la Cámara de Diputados, al inicio de la gestión, aprobar las leyes con el mayor consenso para exhibir legitimidad y fortaleza política. Este último camino quedó, ayer, en duda.
Fuente de la Información: La Nación