Sobreseyeron al camionero que había sido acusado del asesinato de María Cash
15/05/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Se trata de Héctor Romero, quien había sido imputado de “homicidio calificado”.
La sorpresiva detención, a fines de noviembre pasado, del chofer de camiones Héctor Romero, acusado de haber asesinado a María Cash, la diseñadora de indumentaria que fue vista por última vez el 8 de julio de 2011 en Salta, había generado la expectativa de terminar con más de 13 años de misterio. Pero todo se diluyó en las últimas horas.
El sospechoso fue sobreseído. “No existen pruebas suficientes, elementos objetivos, ni evidencias, que permitan vincular de manera fehaciente al señor Romero con los hechos imputados. La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se explicó en un comunicado de prensa difundido por la Oficina de Prensa del Poder Judicial de Salta.
El sobreseimiento fue dictado por la jueza Mariela Giménez, a cargo del Juzgado Federal de Garantías N°2 de Salta. La magistrada ordenó la inmediata libertad del camionero, quien gozaba del beneficio del arresto domiciliario.
Héctor Romero había sido detenido a fines de noviembre pasadoPablo Yapura El Tribuno
“La investigación fue rigurosa, imparcial y respetuosa del debido proceso, priorizando en todo momento la búsqueda de la verdad y la preservación de los derechos constitucionales de las partes involucradas”, se afirmó en el citado comunicado de prensa.
Si bien se conoció hoy, el fallo fue dictado anteayer. La jueza Giménez también sobreseyó por prescripción de la acción penal al abogado Carlos Enzo Cuellar y al médico neumonólogo Jesús Virgilio Chuquisaca, quienes habían sido indagados por los delitos de falso testimonio en concurso ideal con el delito de entorpecimiento a un funcionario público en el normal desarrollo de una investigación.
En su resolución, a la que tuvo acceso LA NACION, la magistrada sostuvo que “el proceso no afecta el buen nombre y honor del que hubieren gozado” los ahora sobreseídos.
El 27 de noviembre pasado, cuando fue indagado Romero, de 71 años, el fiscal general Eduardo Villalba, a cargo de la investigación, había dicho: “Todo indica que Romero le quito la vida a María Cash e hizo desaparecer el cuerpo. No es que la causa se reactivó, nunca dejó de investigarse. La persona [Romero] va a quedar detenida. El Ministerio Público Fiscal va a solicitar rastrillaje sobre zonas particulares. En una hipótesis inicial se podría decir que actuó solo, pero llama la atención el silencio de su entorno”.
El camionero Héctor Romero, acusado de haber asesinado a María Cash, fue sobreseído
Según surge del expediente judicial, el 19 de noviembre pasado, el fiscal Villalba pidió que Romero sea indagado por el delito de homicidio agravado por alevosía.
“Como fundamento de dicho pedido dijo que ‘del análisis de la totalidad de las actuaciones surgía que Romero habría dado muerte a Cash, aprovechándose de la situación de indefensión en la que se encontraba, sin que se hayan encontrado hasta la fecha el cuerpo de la víctima, en razón de lo cual se desconocía la mecánica empleada por Romero que habría provocado el desenlace fatal”, recordó la jueza en su resolución de 421 páginas.
En su dictamen, el representante del Ministerio Público afirmó que “la causa estuvo signada por pistas o datos falsos que de buena o mala fe se fueron dando y que pusieron en resguardo la responsabilidad de quienes cometieron el ilícito” y explicó que “del nuevo análisis se advierte claramente que estos datos condujeron a que no se ponga foco en Romero, porque nunca se lo considero como la última persona que vio con vida a Cash”.
Cuando desapareció, Cash tenía 29 años. Había decidido viajar a Jujuy para vender la ropa que ella misma diseñaba. Su último contacto con su familia fue el 8 de julio de 2011. La joven se había subido a un ómnibus en la terminal de Retiro, con destino a San Salvador de Jujuy, y fue vista por última vez en Salta. Fue captada por las cámaras de seguridad de la entonces empresa concesionaria de la autopista, en la zona conocida como rotonda de Güemes.
María del Carmen Gallegos, la madre de María, con una imagen de su hija
En el momento de la desaparición de Cash, Romero manejaba un camión Mercedes Benz con acoplado para un empresario que posee un supermercado en la ciudad de General Güemes y otro en la localidad de Joaquín V. González, en el sur de Salta.
La situación de Romero quedó comprometida como consecuencia de que durante la investigación dio tres versiones distintas de su encuentro que con Cash.
En su primera alusión a la joven, el 14 de julio de 2011, sostuvo que se cruzó con ella a la altura de la rotonda previo al ingreso a la ciudad de General Güemes. Sostuvo que la levantó y la trasladó hasta la finca denominada El Estanque, sobre la ruta 34. Pero, dos semanas después, cambió su versión y situó el encuentro en el paraje Palomitas, sobre la misma ruta”, explicaron fuentes judiciales.
En una tercera declaración, el 28 de agosto de 2019, volvió a cambiar el lugar donde se encontró a la joven diseñadora y afirmó que la dejó en la gruta de la Difunta Correa, también sobre la ruta 34.
Romero había dicho, cuando declaró como testigo, que subió a la joven en el camión que manejaba cuando Cash hacía dedo a un costado de la ruta nacional 34, a la altura de General Güemes. Y, según dijo, la llevó hasta el paraje Las Palomitas y él continuó viaje.
Sin evidencias
En su fallo, la jueza sostuvo: “Luego de analizar exhaustivamente las evidencias digitales, las conversaciones, los informes forenses y las entrevistas psicológicas realizadas, no se encontró evidencia suficiente que permita sostener, con el grado de probabilidad requerido, la responsabilidad de Romero en el hecho imputado. Además, las evaluaciones psicológicas y criminológicas sugieren que el perfil del imputado es estable, emocionalmente equilibrado y sin características que indiquen predisposición hacia conductas ilícitas o rasgos psicopáticos. En definitiva, las pruebas no aportan elementos suficientes que permitan vincular a Romero con el delito en cuestión bajo los estándares exigidos en este estadio en lo que atañe al perfil psicológico, criminológico del imputado y el análisis de las escuchas telefónicas".
Y, al fundamentar la decisión de dictar el sobreseimiento, la magistrada explicó: “Se advierte que no existen elementos probatorios suficientes que nos permitan concluir que Romero ha participado en el hecho investigado y que, como consecuencia de ello, sea el responsable de delito de homicidio calificado por alevosía en orden al cual ha sido indagado, en virtud de que sus dichos, a la luz de la prueba colecta no resultan inconsistentes, ni han podido ser desvirtuados con los resultados de la pesquisa”, sostuvo la jueza Giménez en el momento de dictar el sobreseimiento del sospechoso.
Según pudo saber LA NACION de fuentes del Ministerio Público, para el fiscal Villalba la decisión de la jueza fue sorpresiva.
“La causa estaba en trámite, con medidas pendientes. E fiscal Villalba va a interponer un recurso de apelación. El Ministerio Público Fiscal no está para nada de acuerdo con lo decidido. La acusación contra Romero se ha sustentado en prueba y que fue malinterpretada [por la magistrada]. La resolución priva a la familia y a la Fiscalía de llegar a un juicio oral”, explicaron las fuentes consultadas.
Fuente de la Información: La Nación