Lo capturaron en Salta y será trasladado al penal de Tucumán
16/10/2021. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Roberto Carlos Rejas, condenado a prisión perpetua por los crímenes de Milagros Avellaneda y de su hijo, Benicio, fue trasladado el jueves a la noche desde la localidad de Coronel Moldes donde fue atrapado, hacia la capital salteña, y se espera que en
El exguardiacárcel se fugó el lunes 27 de septiembre de la sede de Bomberos, ubicada en 25 de Mayo al 1.000 de San Miguel de Tucumán, tras ser sentenciado por los camaristas Stella Maris Arce, Alicia Freidenberg y Eduardo Romero Lascano.
A pesar de la pena, jamás se quebró ni mostró arrepentimiento, y el destino que tuvieron los restos de Milagros y Benicio todavía es un misterio.
Durante casi dos semanas, Rejas se ocultó en el camping "Finca Mi Tata", haciéndose pasar por "Leo", un estudiante jujeño que buscaba algo de paz antes de prepararse para un examen. El jueves finalmente, la Policía logró recapturarlo.
Cerca de la medianoche, el exguardiacárcel fue trasladado desde la comisaría de Coronel Moldes -un municipio ubicado a 62 kilómetros de la ciudad de Salta- hacia la capital de esa provincia, donde quedó alojado en la alcaidía de la Ciudad Judicial salteña. El condenado sería devuelto a la Justicia de Tucumán, ya que Justicia salteña ordenó que sea enviado de inmediato a la cárcel de Villa Urquiza.
Rejas estaba detenido en el cuartel de Bomberos luego de ser encontrado culpable por el homicidio de Milagros y Benicio. Se cree que contó con ayuda para escapar. Amalia Ojeda, madre de la joven y abuela del niño, había recibido amenazas previamente.
El sujeto y su familia tenía estrechos vínculos con la Policía de Tucumán. Su padre es perito forense y dos de sus hermanas se desempeñan en el Servicio Penitenciario. Durante los 16 días que estuvo prófugo fue detenida su pareja, Patricia Gómez, quien es investigada por ayudarlo a escapar la noche del 28 de septiembre último. El encargado del camping explicó que tres personas se habían presentado para pasar la noche, pero dejaron pago un hospedaje para cuatro. Al día siguiente fue cuando llegó Rejas y los otros se fueron, supuestamente, para que “Leo” pudiera concentrarse en estudiar para sus exámenes.
Con los primeros testimonios se pudo determinar que el femicida tuvo por al menos tres cómplices que lo ayudaron a mantenerse en la clandestinidad, aunque por el momento la única persona que está detenida, sospechada por ese delito, es su novia.
“Mi lucha no fue en vano. La lucha de la fiscal María del Carmen de Reuter investigando durante años no fue en vano, no podía ser que esta lucha sea tirada por la borda”, expresó emocionada Ojeda, mamá de Milagros Avellaneda y abuela de Benicio, tras conocer la noticia.
Fuente de la Información: El Ancasti