Soleimani aparece nombrado en la causa AMIA pero nunca estuvo imputado
06/01/2020. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
El militar muerto por un ataque de EEUU figura en un informe reservado. En fuentes judiciales llamó la atención que haya homenajeado a un miembro del Hezbollah que sí estaba acusado de haber organizado el atentado en Buenos Aires.
El asesinado general iraní Qasem Soleimani aparece nombrado en la causa AMIA desde el 2003 en un informe reservado -aunque sin ninguna imputación penal-, pero llamó la atención en fuentes judiciales que haya hecho un homenaje al ex jefe del servicio de seguridad exterior del Hezbollah Imad Moughnieh, acusado de haber sido el cerebro que organizó el comando que voló la sede de la mutual judía en 1994.
El diario La Vanguardia de Barcelona informó que “en el Líbano se le había visto (a Soleimani) orando en solitario sobre la tumba del combatiente del Hezbollah Imad Mougnieh, ejecutado por Israel”.
“Hezbollah juró venganza después de que uno de sus principales comandantes, Imad Moughnieh, fue aniquilado en un ataque en Damasco del que el grupo responsabilizó a Israel. Esto ocurrió en 2008, y aunque el grupo paramilitar ha intercambiado fuego con Israel desde entonces, no ha realizado acción alguna de gran escala”, recordó el diario español.
Por otra parte, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó en Brasilia que Soleimani: “era una persona que según informaciones aquí, estaría involucrada en el ataque a la AMIA, aquella entidad judía que existía en Argentina”.
Sin embargo, Soleimani fue nombrado pero no llegó nunca a ser imputado, aunque la causa AMIA tuvo y tiene vaivenes que van de la mano de la política exterior del gobierno de turno. La Fuerza Quds o Qods, que dirigía Soleimani, es un cuerpo de intervención en el extranjero que forma parte de la Guardia Revolucionaria de la República Islámica de Irán.
En fuentes judiciales se destacó el homenaje que hizo Soleimani a Moughnieh, quien sí estaba sindicado como el “cerebro” de grupo operativo de la Jihad Islámica del Hezbollah que armó el cochebomba con 300 kilos de amonal que voló la AMIA y mató a 85 personas en 1994. El homenaje habla, por lo menos, de una relación política.
Cuando Moughnieh fue asesinado en Siria en el 2008, el fiscal Nisman dijo a la prensa que fue “el jefe operativo del atentado”. Por su parte, el secretario penal de la Corte Suprema, Esteban Canevari, expresó que Moughnieh lideraba el “grupo encargado de cometer atentados fuera de Líbano”.
La Corte investigó el atentado a la Embajada de Israel de 1992. Moughnieh, en el expediente AMIA, figura con ocho variaciones de su apellido, catorce apodos y tres fechas de nacimiento distintas, entre otras características sospechosas.
En octubre de 2003, el entonces juez Juan José Galeano, recibió un informe reservado desde la Embajada Argentina en Londres que nombraba a Soleimani como comandante de la fuerza Quds, en reemplazo del comandante Ahmad Vahidi sobre quién si se emitió un pedido de captura internacional.
Entonces, el presidente era Néstor Kirchner y el canciller era Rafael Bielsa. Con el informe se abrió un legajo que debe estar aún en la unidad fiscal AMIA que dirigió Alberto Nisman hasta su muerte en el 2015.
Galeano emitió una alerta roja sobre Vahidi y Ahmed Reza Ashgari, otro ex miembro de la fuerza, pero no profundizó la investigación sobre Solemani porque unas semanas después fue suspendido en su cargo, junto antes de que la entonces senadora Cristina Kirchner declarara en el primer juicio por la AMIA.
Fuente de la Información: El Tribuno