Prorrogaron el inicio del juicio por el femicidio de Nahir Klimasauskas Viazzi
20/07/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Gustavo García Viarengo, llega con prisión preventiva y un historial de irregularidades procesales. La familia de la víctima exige justicia y reclama la prisión perpetua.
La jueza de la Sala I del Tribunal de Juicio de Orán, Norma Roxana Palomo, reprogramó el juicio contra Gustavo García Viarengo por el femicidio de Nahir Nuri Klimasauskas Viazzi, cometido hace más de dos años en la ciudad de Orán.
García Viarengo llegará al juicio con prisión preventiva, se encuentra imputado por el delito de "homicidio agravado por haber existido relación de pareja y haber sido perpetrado mediante violencia de género".
La mañana del 19 de febrero de 2023 se reportó la presencia de una mujer sin vida en el patio interno de un edificio de la zona centro de Orán. Había caído desde el cuarto piso. En ese momento estaba acompañada por el acusado, que era su pareja.
El inicio del juicio estaba previsto para el próximo lunes 28 de julio, pero el Poder Judicial informó que se prorrogó "tentativamente" para el 7 de agosto, a raíz de un planteo formulado por la Unidad Fiscal integrada por Claudia Carreras y Pablo Cabot.
La madre de Nahir es la fiscala penal Mónica Viazzi y el padre es el ingeniero aeronáutico Rubén Klimasauskas. El abogado Matías Adet los representa en el proceso.
El padre de la víctima destacó a Salta/ que espera la realización del juicio, y reclama prisión perpetua para García Viarengo. "Quisiera creer en la justicia", expresó Klimasauskas. Además, sostuvo que tenía solo la información oficial de que la prórroga se debía a "un problema de agenda" del juzgado.
“Hay que caminar mucho para que haya justicia”
"Quisiera que las cosas sean claras", manifestó Klimasauskas, "pero han sucedido muchas cosas raras", recalcó. Lo primero que recordó fue que García Viarengo se fugó después del femicidio de Nahir. En la reconstrucción se supo mediante las cámaras, que bajó tras la caída de la joven y se paró junto al cuerpo sin verificar si aún tenía signos vitales. Luego tomó algo del piso, que no se pudo identificar qué era, y se dirigió hacia la frontera con el Estado Plurinacional de Bolivia. Además escondió el auto en una finca. Sin embargo, regresó porque un primo lo convenció de entregarse a las autoridades.
Nahir tenía 26 años, estaba a punto de recibirse de licenciada en Comunicación Social en la Universidad Nacional de Córdoba. Era militante feminista e integraba la Colectiva Panambí, que hoy reclama justicia por ella.
Había regresado a vivir a Orán durante la pandemia, y trabajaba de forma remota en una agencia de publicidad y marketing. Desde hacía aproximadamente dos años mantenía una relación con García Viarengo, un cuentapropista que tenía un negocio de alimentos.
"Sabemos que a las 7.33 se produjo la caída de mi hija", precisó su padre en otra entrevista con Salta/12. En ese momento García Viarengo llamó a la madre de Nahir, "le dice que mi hija salió corriendo y se tiró del balcón". KIimasauskas señaló que "es imposible" que Nahir saliera corriendo y se tirara, porque en el lugar había un living, con diversos muebles que debía atravesa, y que presentaban "un obstáculo" para un movimiento o secuencia como la que relató el novio.
Antes de que se encontrara el cuerpo de la joven, se publicó un mensaje desde su perfil personal de Facebook. El texto decía: “Me arruinaste la vida, Gustavo”.
La autopsia reveló lesiones en las manos y en una rodilla de Nahir, compatibles con un intento de sostenerse de forma vertical desde una estructura del balcón. Incluso había un "pedacito de mampostería" al lado de su cuerpo. Además, cayó de espaldas.
La fiscalía finalmente descartó la hipótesis de suicidio e imputó a García Viarengo por femicidio. Sin embargo, el juez de garantías Francisco Oyarzú lo benefició con la prisión domiciliaria pese al riesgo de fuga existente. Klimasauskas indicó que el magistrado no había dispuesto que se hiciera un informe ambiental, tampoco había ordenado la colocación de una tobillera electrónica, y que además había designado como cuidador al propio padre del imputado, quien tenía antecedentes por abuso sexual de un menor de edad.
Asimismo, el padre de Nahir cuestionó a un perito del Cuerpo de Investigaciones Fiscales que afirmaba que no había huellas en el balcón y que, por lo tanto, no se podía asegurar que el femicida hubiera estado allí. También señaló contradicciones técnicas: mientras en el living con piso de porcelanato se detectaron huellas plantales, en el balcón con superficie rugosa no quedaron marcas, lo que fue interpretado erróneamente por el perito como prueba de ausencia. Klimasauskas explicó que ese tipo de superficie no permite registrar huellas, y que el argumento utilizado era inaceptable desde el punto de vista técnico.
Según Klimasauskas, la fiscala Claudia Carreras, que tomó la testimonial del perito, lo confrontó directamente con las inconsistencias. Al preguntarle si podía sostener que García Viarengo no había estado en el balcón solo por la ausencia de huellas, el perito reconoció que no podía afirmarlo. Esa intervención fue considerada por la familia como clave para desmontar una construcción pericial errónea.
La domiciliaria de García Viarengo solo pudo revertirse en mayo de 2023, cuando la Sala II del Tribunal de Impugnación revocó el arresto domiciliario al hacer lugar a un recurso de apelación presentado por la unidad fiscal integrada por Carreras y Pablo Cabot.
Klimasauskas recalcó que el procurador general Pedro García Castiella requirió el juicio político de Oyarzú por mal desempeño en varias causas, incluyendo la del femicidio de Nahir. Pero cuestionó que aquel pedido no prosperó. “¿Dónde está el Consejo de la Magistratura?”, reprochó. “Está durmiendo (el requerimiento) en el cajón de un político. Porque (el juez) ha llegado ahí gracias a un político", consideró.
Mientras, el juez "sigue ejerciendo". Además, el padre planteó dudas sobre posibles intereses ocultos detrás del accionar del juez y el tratamiento del peritaje en la causa.
“Hay que caminar mucho para que haya justicia”, expresó, aunque aclaró que sigue en esta lucha precisamente por eso: porque quiere creer en que es posible. También consideró que el problema no es solo de personas sino del funcionamiento institucional: “El nombre de un juez en un entorno de corrupción es uno más. Como en las organizaciones criminales: lo matamos a tal, pero ya está otro. Eso no es solución. La solución es que haya un sistema en el que se pueda confiar”.
"No somos los únicos", mencionó en referencia a quienes luchan contra el mal funcionamiento del sistema judicial e hizo alusión a otros casos graves cometidos en Salta como lo fue el crimen de Cintia Fernández, por el que la madre de la víctima, Ana Fernández, tuvo que luchar muchos años para que llegara a juicio y se esclareciera.
Por otro lado, Klimasauskas desmintió que la madre de Nahir ejerza presión para que García Viarengo permanezco detenido, como señalan versiones que circulan desde el entorno del acusado. “¿Dónde está la influencia?”, inquirió aludiendo a que el juez de garantías otorgó la prisión domiciliaria sin atender a los antecedentes del caso. Para Klimasauskas, esas versiones son parte de una estrategia de desinformación de la familia de García Viarengo.
El padre de Nahir, que no reside en Orán, dijo que en su caso no tenía conocimiento de que su hija fuera víctima de violencia de género. “Es complicado. Yo no sabía nada (…) Si yo hubiese sabido algo, mi hija no hubiese muerto. La habría sacado de ese lugar”, sostuvo.
Fuente de la Información: Página 12