Narcotráfico en la cárcel: al no creer en lo legal fueron por otorgar “propinas”
15/08/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Este jueves se retomaron las audiencias del juicio que investiga a veinte personas acusadas de integrar una organización narcocriminal con operaciones dentro de la Unidad Carcelaria 1
Este jueves se retomaron las audiencias del juicio que investiga a veinte personas acusadas de integrar una organización narcocriminal con operaciones dentro de la Unidad Carcelaria 1. El hermano de un interno dijo porque y como se pagaba por la seguridad dentro del penal.
La causa involucra a personal penitenciario, internos y familiares.
Durante la octava jornada del debate oral, el tribunal continuó con la recepción de pruebas testimoniales.
Por la mañana, declararon profesionales del Ministerio Público, responsables de elaborar los informes socioambientales de los acusados.
Estos documentos incluyeron información sobre las condiciones de vida, vínculos familiares, consumo de drogas, estado de salud, situación laboral y contexto barrial de los imputados.
Uno de los puntos destacados en los informes fue el impacto económico que sufrieron los agentes del Servicio Penitenciario implicados, quienes al ser suspendidos de sus funciones vieron reducido su salario en un 50%.
Antes del receso del mediodía, declaró el hermano mayor de un interno mencionado en el proceso como uno de los beneficiados por gestiones irregulares dentro del penal.
“Propinas”
El testigo relató que su hermano lleva seis años detenido, y que fue trasladado en distintas oportunidades hasta quedar alojado en la Unidad Carcelaria 1, tras la condena.
Según su testimonio, en 2023 su hermano comenzó a ser amenazado y hostigado dentro del penal, lo que se trasladó a la familia a través de redes sociales.
Ante este contexto, el testigo señaló que recurrió a un amigo del barrio, que también tenía un hermano preso, y a través de él logró contacto con un funcionario penitenciario –uno de los imputados– apodado “Chato”.
Aseguró que desde ese momento cesaron los hostigamientos, y que decidió entregar dinero a modo de agradecimiento o “propinas”: dos pagos en efectivo y una transferencia.
Sostuvo que no tenía confianza en las vías legales y por eso optó por esta alternativa.
También indicó que a través del mismo canal obtenían información sobre la atención médica de su hermano dentro del penal, como la entrega de medicamentos y curaciones por una infección en el pie.
En su declaración anterior ante la fiscalía, ya había manifestado que su amigo le había advertido que para proteger a su hermano sería necesario pagar una suma de dinero.
El juicio está a cargo del Tribunal de Juicio Sala VII, integrado por los jueces Federico Diez (presidente), Paola Marocco y Javier Araníbar (interino). Por parte del Ministerio Público intervienen el procurador general Pedro García Castiella y los fiscales Ana Salinas Odorisio, Santiago López Soto y Gustavo Torres Rubelt.
Los agentes penitenciarios están imputados por exacciones ilegales agravadas, concusión, comercialización agravada de estupefacientes dentro de un penal y asociación ilícita, todo ello en concurso real. Los internos y familiares enfrentan acusaciones por comercialización de drogas agravada por la participación de más de tres personas en un establecimiento carcelario, y también por asociación ilícita.
Fuente de la Información: Nuevo Diario