Milei se negó a borrar el posteo en el que atacó a Ian Moche, el niño con autismo
13/08/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Argentina
Al igual que con la criptoestafa, volvió a argumentar que sus redes sociales son personales y no lo representan como presidente. También dijo que está “amparado por la libertad de expresión”
La mamá de Ian respondió que “la libertad de expresión tiene un límite, y el límite está en agredir”.
El presidente Javier Milei se negó a borrar el posteo en el que se había referido a Ian Moche, el niño con autismo que lo había acusado al mandatario de insultarlo, tras haber presentado un escrito en la Justicia en el que alegó que sus redes sociales son personales y no lo representan como jefe de Estado, además de considerar que está amparado por el derecho a la libertad de expresión.
La presentación judicial, realizada en la causa iniciada por la familia de Ian, buscó despegar al mandatario con el uso del mismo argumento de que sus dichos en redes son a título personal y no como mandatario, tal como había expresado en la causa por la criptoestafa Libra, aunque el fiscal Oscar Julio Gutiérrez Eguía dictaminara lo contrario.
En el escrito, los abogados de Milei calificaron la demanda de la familia de Ian como “carente de sustento jurídico” y negaron que la cuenta @JMilei sea una cuenta oficial del Poder Ejecutivo Nacional y que sus posteos hayan sido una “agresión al honor, reputación o integridad” del niño.
También rechazaron que un reposteo sea una “ratificación o legitimación de agravios”, que la publicación haya generado un “daño irreparable, grave e inminente” y que el “interés superior del niño habilite restringir la libertad de expresión política”.
El Presidente insistió en que el tuit fue una “acción privada” que contenía una “expresión crítica sobre la labor y agenda subyacente de un periodista públicamente conocido”, en alusión a Paulino Rodríguez, y no un ataque al niño de 12 años.
“(El reposteo) Fue realizado desde mi cuenta personal (@JMilei) y no implicó una decisión administrativa, normativa o acto estatal alguno, ni implicó uso de fondos públicos, sino que constituyó una acción privada que contiene la expresión crítica sobre la labor y agenda subyacente de un periodista públicamente conocido”, sostuvo el mandatario en el texto.
Además, desacreditó la denuncia al afirmar que no tuvo que ver con una cuestión legal sino ideológica.
Y también cuestionó “esta cultura de la cancelación es un fenómeno global que atenta contra la libre expresión y la libertad de los individuos sean ciudadanos; funcionarios o como en mi caso particular presidentes”.
Por su parte, Ian aseguró en una entrevista con El Destape: «Lo del tuit no fue un error porque él sabía lo que estaba haciendo. Lo mejor que podría hacer Milei es pedir una disculpas públicas».
La denuncia comenzó luego de que Milei reposteara un mensaje de un usuario anónimo denominado “Hombre gris” que criticaba al periodista Paulino Rodríguez y al niño de 12 años, conocido por su tarea como activista por la inclusión y la defensa de los derechos de las personas con discapacidad, al que Milei acusó de proceder de “una familia ultrakirchnerista”.
Con el patrocinio letrado del especialista en Derecho Constitucional Andrés Gil Dominguez, el niño inició una acción judicial contra el Presidente con el objetivo de que elimine una publicación realizada el 1° de junio, a través de su cuenta oficial verificada en la red social X (ex Twitter) por violar de forma manifiesta el principio del interés superior del niño.
La respuesta de la mamá de Ian
Marlene Spessio, madre de Ian Moche, cuestionó las declaraciones y publicaciones que involucran a su hijo menor de edad, y apuntó a la imposibilidad de obtener una respuesta directa del presidente Javier Milei en medio de la polémica.
En diálogo con Noticias Argentinas por Radio Splendid AM 990, Spessio aseguró: «A mí me hubiera encantado que sea una persona común y corriente, porque cuando suceden estas cosas vos tenés la oportunidad de hablar y que te conteste».
La madre del joven autista recordó un episodio anterior con una organización: «Nos pasó una vez con una fundación que dijo que mi hijo no era autista, un falso autista. Poner la foto de mi hijo diciendo falso autista era horrible. Pedí que retiraran la foto y que pidieran disculpas públicas, y lo hicieron. Esto yo no lo tengo con el presidente».
Spessio lamentó que «con toda la estructura presidencial es imposible llegar o tener contacto» y remarcó que «no nos olvidemos que es un adulto contra un menor».
Según relató, el caso derivó en hostigamiento: «Al principio fue una cacería de brujas. Nos investigaron, nos operaron, sacaron fotos de mi casa, sabían toda mi vida». En ese sentido, planteó que «la libertad de expresión también tiene un límite, y el límite está en agredir».
La mujer insistió en que «solo pedimos que retire la foto de mi hijo y que se entienda que es un menor» y compartió las palabras del propio Ian: «Mi hijo me dijo: ‘Vamos a esperar a ver qué dice la justicia, y si no, en la injusticia’».
«No puedo dejar de ser madre, el presidente no puede dejar de ser presidente», advirtió, al tiempo que confirmó que «nos tenemos que presentar ante la justicia y denunciar un hecho de violencia institucional. Hay que hacer valer nuestros derechos y esperar a que la justicia accione».
Finalmente, reiteró: «La libertad de expresión tiene un límite».
Fuente de la Información: Tiempo Argentino