La familia acude a casación por el femicidio de Nahir Klimasauskas
04/11/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Denuncian graves falencias en el proceso judicial. Tras el fallo absolutorio que benefició a Gustavo García Viarengo, la querella ejercida por el abogado Matías Adet busca revertir la sentencia en el Tribunal de Impugnación
Denuncian graves omisiones probatorias, revictimización y falta de perspectiva de género.
La familia de Nahir Nuri Klimasauskas Viazzi acude a casación para que el fallo absolutorio dictado por el Tribunal de Juicio de Orán sea revisado por el Tribunal de Impugnación. La decisión judicial, adoptada por mayoría, benefició a Gustavo García Viarengo, quien estaba acusado por el femicidio de su pareja,
Nahir perdió la vida al caer del cuarto piso del edificio donde vivía, el 19 de febrero de 2023 en la ciudad de Orán. En ese momento se encontraba con García Viarengo, quien asegura que la joven se arrojó. Sin embargo, la autopsia psicológica determinó que no se suicidó.
Con el voto mayoritario de la jueza Norma Roxana Palomo y el juez Aldo Primucci, el Tribunal de Juicio absolvió a García Viarengo por el beneficio de la duda.
En cambio, el juez Aníbal Burgos votó en disidencia. Según su análisis, quedó acreditada la responsabilidad penal de García Viarengo en el femicidio de Nahir y consideró que debía imponérsele una pena de prisión perpetua.
“El voto disidente es impecable”
“El voto del doctor Burgos es impecable, analiza toda la prueba con claridad y coherencia”, sostuvo sostuvo el abogado Matías Adet, que representa a la familia de Nahir en la querella.
El abogado remarcó que el voto disidente refuerza la decisión de la querella de recurrir el fallo. “Lo hacemos con respeto, pero con el modo más categórico que existe desde ese respeto, discrepando del voto mayoritario”, expresó en diálogo con Salta/12.
Adet advirtió deficiencias en los fundamentos del fallo absolutorio. “Los jueces que votaron por la mayoría cometen un error no menor, consideran que, al no tener una comprobación nítida, casi fílmica, de la mecánica del hecho, no pueden tener certeza sobre la responsabilidad penal", explicó. Para el abogado, "es como decir que hace 50 años no se podía condenar a nadie porque no había cámaras”.
También señaló que el voto mayoritario del Tribunal incurrió en contradicciones al reconocer un contexto de violencia de género en perjuicio de Nahir, pero analizar el momento del hecho como si se tratara de una situación común entre personas sin antecedentes de violencia. "En todo el derrotero previo sí tienen en cuenta y aceptan la intromisión en la intimidad y en otros ámbitos que ha tenido el imputado en perjuicio de Nahir”, sin embargo, “a la hora de valorar el hecho no tienen en cuenta esta circunstancia”.
En cambio, “el voto absolutamente solvente del doctor Burgos analiza todo lo que ocurrió y toda la circunstancia”, recalcó.
"Una pericia lamentable"
Una de las pruebas que la querella considera no fue valorada correctamente es el informe de los peritos del Cuerpo de Investigaciones Fiscales y de parte, que afirma que no había huellas plantares del imputado en el balcón, pero él mismo reconoció haber estado allí. “Cuando preguntamos (...) la respuesta de los peritos es, ‘yo no valoro declaraciones, yo solo valoro la prueba criminalística’”, resaltó Adet
Además, el informe tampoco encontró huellas de Nahir en el balcón, y está claro que ella estuvo ahí. El padre de Nahir, Rubén Klimasauskas, explicó que eso se debe a la textura del piso, que no permite que se marquen las huellas.
"Una pericia realmente lamentable", calificó el abogado querellante. "Decía que, por ejemplo, en el living había orden" a pesar de que no era así, "había un colchón tirado en el piso, atravesado sobre el sillón, una almohada tirada al otro lado, había una mesa con un montón de bebidas y un vaso. O sea, no había orden", señaló.
Pruebas ignoradas
En el juicio se acreditaron ocho hechos de violencia previos. Uno de los puntos más relevantes fue la conducta de García Viarengo tras la caída de Nahir: en lugar de pedir ayuda al 911 o verificar si la joven seguía con vida, habló por teléfono con su expareja durante 72 segundos, y nunca explicó el contenido de esa conversación. Luego se comunicó con Mónica Viazzi, madre de Nahir y fiscal, pero ya se había retirado del lugar. Esta secuencia, registrada por cámaras y respaldada por registros telefónicos, fue interpretada por la querella como evasiva y contradictoria con su versión de los hechos.
También se cuestionaron las lesiones que presentaba el imputado. Alegó que se las hizo practicando enduro, pero una herida en la cabeza no era compatible con el uso de casco. La querella atribuyó esa lesión a una situación de lucha, reforzada por el hallazgo de ADN de García Viarengo bajo las uñas de Nahir, lo que indicaría un intento de defensa.
El padre de Nahir señaló que su hija cayó de espaldas y se sostuvo de la mampostería, lo que contradice la versión del acusado, quien afirma que ella se tiró. Las cámaras registraron que García Viarengo se acercó al cuerpo, recogió algo y se retiró.
El acusado huyó de la escena pero luego regresó. Un primo de García Viarengo aseguró que lo llevó de nuevo al edificio, sin embargo, el padre de Nahir pone en duda que haya sido este hombre quien lo transportó de regreso, indicó que en las filmaciones se lo vio a García Viarengo bajar de un auto oscuro.
"Él volvió una hora aproximadamente después. Estuvo preparando la escena. Evidentemente no lo dejaron ir, justo ahí está el Puesto 28 (de control de Gendarmería), ya tiene para salir (a Bolivia)", dijo Klimasauskas.
Pese a ese intento de huida, otra irregularidad fue que cuando ya estaba imputado por femicidio, el juez de garantías primero negó la prisión preventiva para García Viarengo y después le dio la domiciliaria y la persona designada en primer lugar para que se hiciera cargo de él era su padre, condenado por abuso sexual. Aunque esa decisión pudo revertirse.
El temor de la familia de Nahir es que García Viarengo, ahora que está en libertad, se vaya de Orán y en caso de revertirse el fallo, no lo puedan encontrar.
No existía ideación suicida
“Esa es una conclusión también que se logró en el debate, no solo desde el análisis pericial, técnico, que se pudo hacer en la investigación y confirmarse en debate (...) No existía ideación suicida en absoluto respecto de Nair, no había ningún tipo de intención de atentar contra su propia vida”, manifestó Adet.
“Más allá de todo lo que se demostró en cuanto a proyectos definidos para su vida futura, (tenía) una red, si se quiere familiar y de amistades, de las cuales se había alejado bastante por la toxicidad de la relación en la que estaba imbuida”, señaló.
Dos psicólogas que realizaron la autopsia psicológica de Nahir dijeron que no tenía intención suicida. Además, pudieron concluir que hubo situaciones de celopatía por parte del acusado, hechos públicos, que no fueron aislados.
Profesionales que habían asistido a Nahir en terapia, también concluyeron que no tenía intenciones de suicidarse. Un psiquiatra de Córdoba "dijo que jamás ella se podría haber suicidado", contó el padre de Nahir. En el mismo sentido se pronunció otra especialista que la asistió en Orán.
Revictimización
Uno de los momentos revictimizantes del juicio, tuvo lugar cuando declaró la psicóloga del Ministerio Público Fiscal, Carolina Cornejo, quien realizó la pericia de García Viarengo. La perita afirmó que Nahir padecía bipolaridad heredada de su padre, sin embargo, "reconoció que llegó a esa conclusión solo por lo que le contó el imputado”, explicó Adet. “Era el imputado contándole lo que le parecía bien contar, y para la profesional esa versión era una verdad incorrupta”, señaló el abogado.
“¿Por qué hablarías mal de la persona que decís haber amado? ¿Cómo podés asignarle diagnósticos a ella y a su padre?", cuestionó. "Lo que sí puedo reclamar es que ese disparate sea interpretado adecuadamente y desvirtuado a la hora de valorarlo”, sostuvo Adet.
Rubén Klimasauskas expresó su indignación: “Nunca hablé con esa mujer, y ella dijo que yo era bipolar. ¿Cómo puede decir que mi hija lo era por mí?”, cuestionó. Lamentó no haber denunciado a esta psicóloga y a otros que, según consideró, no actuaron correctamente durante el proceso.
El padre de Nahir es ingeniero aeronáutico y como tal ha ocupado puestos de alto perfil en grandes empresas, y recalcó que para trabajar en esos lugares ha pasado por diversas evaluaciones psicológicas y nunca obtuvo un diagnóstico como el que hizo Cornejo, sin haberse entrevistado con él.Tampoco Nahir tenía ese diagnóstico.
Klimasauskas también señaló que los abogados defensores distorsionaron y descontextualizaron un mensaje de la joven, en el que ella afirmaba 'casi me ahorcó' en referencia al imputado. Sin embargo, dijo que la defensa lo leyó como 'casi me ahorco', sin acento y recortado, alterando el sentido original.
“No hubo perspectiva de género”
El padre de Nahir y su abogado coincidieron en que la jueza y el juez del voto mayoritario no aplicaron perspectiva de género. Consideraron que la Unidad Fiscal, integrada por Claudia Carreras y Pablo Cabot, sí lo hizo.
“Habla un poco de la necesidad de capacitación de nuestro poder judicial y de todos los operadores jurídicos, me incluyo. Todos tenemos todavía mucho por hacer en la materia", analizó Adet.
"Cuando tenés casos como el que estamos discutiendo, donde tenés a un imputado queriendo controlar y manipular la vida de su víctima y eso está acreditado, no podés tomarlo como un dato menor o anecdótico, como un mero exceso de celos, si se quiere, o de involucramiento en la relación de pareja, sino que tiene otra connotación mucho más grave, es casi que, considerar a la persona propiedad del agresor y convertirla casi en un objeto y no respetar la individualidad y la libertad del otro. Hay mucho por trabajar”, consideró.
Adet y Klimasauskas subrayaron que el imputado se dirigió de forma agresiva contra la fiscala Carreras, y ningún integrante del tribunal intervino ante ese comportamiento. “La doctora Palomo, que presidía el debate y votó por la absolución, tenía facultades para llamar la atención al imputado y no lo hizo”, señaló el abogado.
Justicia pendiente
“Yo no vivo, yo sobrevivo. Sin mi hija no voy a ser feliz nunca. Pero quería un poco de paz. Que por lo menos hubiera tenido justicia”, expresó Rubén Klimasauskas."Por supuesto que no creo en esta justicia (...) Qué sé yo, por lo menos le podrían haber dado una pena menor (...) Es la amargura que tengo", manifestó.
“La familia de Nahir no está buscando ni revancha ni venganza de ningún tipo, lo que está buscando es justicia, para que el hecho del cual fue víctima no quede impune”, expresó por su parte Adet. “Esa es la misión de la familia y esas intenciones están intactas y conociendo los fundamentos del fallo, con más expectativa puesta en poder revocar la absolución que se dictó en primera instancia”, sostuvo.
Fuente de la Información: Página 12