Hubo encubrimiento de la Iglesia en el caso del cura Aguilera
25/07/2019. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
El fiscal de Impugnación, Rodolfo Villalba Ovejero, emitió duras críticas contra las autoridades religiosas por el tratamiento al caso del cura José Aguilera, acusado de abuso de dos menores.
El fiscal Rodolfo Villalba Ovejero en un escrito presentado repasó el caso y citó doctrina y precedentes jurídicos por la causa del cura Aguilera.
Señaló que mantener el anonimato a los responsables es un “cobarde encubrimiento de las autoridades religiosas”.
En el escrito presentado, el Fiscal repasó el caso y citó doctrina y precedentes jurídicos. También sostiene que, tras conocerse el fallo del Tribunal de Impugnaciones a cargo de Adolfo Figueroa, al decretar el sobreseimiento del enjuiciado, José Carlos Aguilera, deja impune una maniobra delictiva.
Luego hace una comparación entre las dos resoluciones de una misma sala, donde otro juez, Antonio Omar Silisque, declaró la imprescriptibilidad en una causa de abusos, en la que se denuncia al sacerdote Emilio Lamas, lo que entiende “es una inexplicable contradicción” y que esas discrepancias concitan en los operadores del sistema judicial y de los justiciable, desconcierto y desasosiego en lo que al funcionamiento de la justicia respecta.
Sobre el voto de Silisque, dijo Villalba Ovejero que el juez “parte de la premisa de entender imprescriptible el abuso infantil desde la óptica del interés superior del niño, con total prescindencia del tiempo transcurrido entre la consumación del ilícito y el momento de su develamiento”.
Señaló también el Fiscal de Impugnación que los hechos de abusos perpetrados por sacerdotes, han permanecido en el anonimato, gozando los abusadores de una impunidad debido a la falta de denuncias de las víctimas y el cobarde encubrimiento de las autoridades religiosas”.
El Fiscal de Impugnación considera que debe “someterse a juicio y castigo a una persona acusada de graves delitos cometidos en contra de la infancia (…) y que no debe darse tregua a la lucha emprendida contra la pedofilia”. E insistió en que la revocatoria pretendida encuentra cabal asidero, porque está en juego la conducta del eclesiástico José Carlos Aguilera, acusado de haber “perpetrado tan repudiable delito, no sólo en perjuicio de dos menores de edad, sino por parte de un sacerdote católico, nada menos en el propio corazón de la “capital de la fe”.
Fuente de la Información: Nuevo Diario