Dos bandas y turnos diarios, la mecánica dentro de la finca
15/12/2025. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
La investigación reveló una estructura organizada. Con un flujo estimado de 300 vehículos por día, transportando en promedio diez bultos cada uno, los ingresos diarios superaban los 3,7 millones de pesos.
Uno de los aportes más significativos incorporados a la causa Finca Karina es la reconstrucción del modo de administración del predio. La actividad ilegal no estaba centralizada en una sola estructura, sino que era gestionada por dos grupos que se turnaban día por medio. En una jornada actuaba el grupo liderado por Luis Segundo Suárez, actualmente detenido, quien mantenía vínculos directos con Gladis Salazar, titular registral de uno de los inmuebles, y con su hermano Alfredo Salazar, identificado como coordinador de la organización desde Bolivia y hoy prófugo. En los días siguientes, el control pasaba a la familia Cardozo, que además de supervisar la operatoria residía dentro del predio. Esa alternancia cotidiana aseguraba la presencia constante, la recaudación de los cobros y la continuidad del contrabando sin fisuras.
El circuito económico fue determinado con exactitud a partir de informes elaborados por la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y la Dirección General de Aduanas. Cada vehículo abonaba 2.000 pesos para acceder al predio y 1.000 pesos por cada bulto cargado o descargado en los gomones. Con un flujo estimado de 300 vehículos por día, transportando en promedio diez bultos cada uno, los ingresos diarios superaban los 3,7 millones de pesos. En términos anuales, el volumen económico generado por el contrabando en Finca Karina rozaba los 3.000 millones de pesos, reflejando el impacto fiscal de la maniobra.
El megaoperativo desplegado en agosto, con la participación de más de 170 efectivos de Gendarmería, Prefectura, Policía Federal, Policía de Salta, Aduanas y ARCA, concluyó con la clausura del predio, que permanece bajo custodia permanente. En ese marco, el fiscal federal de Orán, Marcos Romero, formalizó la acusación contra once personas por los delitos de contrabando agravado y asociación ilícita.
En las audiencias posteriores, la Cámara Federal redefinió la situación procesal de los imputados. Luis Segundo Suárez sigue detenido en el Servicio Penitenciario Federal. Gladis Salazar cumple arresto domiciliario, aunque esa condición fue supeditada por el tribunal a la colocación de una tobillera electrónica, que al cierre de las últimas resoluciones aún no se había concretado. Pedro Rivero también permanece con arresto domiciliario. El resto de los acusados continúa en libertad, bajo medidas estrictas: prohibición de salida del país, presentaciones periódicas ante fuerzas de seguridad y prohibición total de acercarse a Finca Karina hasta la finalización del juicio. La investigación mantiene, además, cuatro prófugos declarados en rebeldía y con órdenes de captura vigentes.
Se cumplió un año del Plan Güemes
El 12 de diciembre se empezó a implementar en la localidad fronteriza de Aguas Blancas, el plan Güemes a cargo del Ministerio de Seguridad de la Nación tras gestiones del gobernador Gustavo Sáenz.
Fuentes hicieron notar que si bien se mejoró la presencia de las fuerzas federales, sigue el contrabando y que se necesita trabajar de una manera integrada.
Fuente de la Información: El Tribuno