Categóricas revelaciones de la periodista en torno a las amenazas a Sáenz
27/02/2018. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
La joven contó cómo conoció al sicario, su conexión con Delaloye, la participación del intendente Jarsún y otros detalles más en torno a la causa
De manera exclusiva, El Intra tuvo acceso a parte del expediente que se abrió el 6 de febrero pasado para investigar las supuestas amenazas en contra de la integridad del intendente, Gustavo Sáenz. Del mismo, surgen detalles reveladores que incluyen hasta al cantante, Abel Pintos, el intendente de Rosario de Lerma, Ignacio Jarsún, la concejal, Griselda Galleguillo y un camarógrafo de Canal 10, entre otros.
El expediente refleja dos relatos respecto a cómo se gestó la reunión en la que se habría planeado un atentado a la vida del intendente capitalino. Uno de ellos, fue brindado por el propio, Gustavo Tolava, cuando saltó a la arena mediática y develó detalles de esta supuesta trama.
Sus dichos, sin embargo, no pueden tomarse como ciertos e incluso quedaron cuestionados tras su posterior detención. Tolava es un joven exconvicto; sin duda, la policía y la justicia lo conoce muy bien, en especial, por su propensión a realizar denuncias que, a la postre, quedan en la nada.
Otro de los relatos existentes en el expediente, en el cual se refieren detalles de cómo se conocieron cada uno de los imputados y el día a día hasta llegar a la mentada reunión en la confitería de la estación de servicio YPF, en el shopping Nuevo NOA, surge de la declaración testimonial de la periodista, María Emilia López Fadel.
Según Tolava, fue esta periodista quien lo contactó con Pablo Delaloye, hermano de Mario, empresario y propietario del boliche “Elephant”. Incluso, en sus declaraciones menciona el nombre de la reportera y el de Sergio Gutiérrez, un guardiacárcel, quien hacía de seguridad en dicha disco.
Tolava se refiere muy poco a cómo fue el camino previo para llegar a Delaloye, a quien apuntó como la persona que intentó contratarlo para “amedrentar” a Sáenz, cruzándole el auto y haciéndole algunos tiros para que se “cague de miedo”.
La reunión, según surge del expediente, existió, pues Miguel Chávez, encargado de la estación de servicio, accedió a revisar las imágenes de las cámaras de video del 5 de febrero. En esa fecha, a las 23.58, se advierte la llegada de un automóvil, Citröen, color gris, del cual descienden dos sujetos.
Se trata de Pablo Delaloye y Juan Urzagaste, quienes ingresan a la confitería y se sientan en una mesa a la espera de un tercer sujeto. A los pocos minutos, aparece Tolava, quien vestía una remera con la leyenda “The Punisher”, de Marvel.
De esta manera, quedó probado que la reunión existió, aunque no se pudo saber qué fue lo que hablaron los tres hombres reunidos. Sólo se tienen dos versiones cruzadas: una, brindada por Tolava y otro, aportada por la defensa de Delaloye y Urzagaste.
Un celular, Abel Pintos y amenazas
Para tratar de armar este rompecabezas, la justicia citó a prestar declaración a la periodista, María Emilia López Fadel, una joven de 34 años, quien señaló que se desempeñó en varios medios, aunque no indicó en cuáles en particular.
Para explicar cómo fue que Tolava la nombró al exponer el ataque al intendente Sáenz, López Fadel se remontó a los días previos al “Festilerma”, celebrado el primero de febrero pasado, oportunidad en que perdió su teléfono celular al subir a una unidad de Saeta, en la esquina de las calles Belgrano y República de Siria.
Por esta razón, y según lo suscribió en su muro de Facebook, reactivó su línea una vez que logró comprar otro aparato. Al hacerlo, en la casilla de mensajes, saltó un aviso de una persona que se identificó como “Gustavo Agüero”, quien aseguraba poder rastrear y recuperar su teléfono, ya que esa era su especialidad.
Interesada en poder encontrar su teléfono, la periodista accedió a los servicios ofrecidos y acordaron un encuentro, el que se concretó a los días en la esquina de las calles Ibazeta y Belgrano, cerca de una remisera, donde Gustavo estaba seguro de encontrar el aparato.
Tras encontrarse y conocerse con la periodista, fueron hasta la remisera en busca del teléfono, pero no hubo éxito. López Fadel, no obstante, agregó que luego volvieron a hablar, oportunidad en la que “Gustavo” le preguntó si “estaba en los medios”.
La respuesta fue afirmativa, lo que dio pie a que “Gustavo” abriera el juego, pues le aseguró que era amigo del intendente de Rosario de Lerma, Ignacio Jarsún y de la concejal, Griselda Galleguillo. “Me dijo que como se venía el festival, tenía la idea de que ella pudiera cubrir el show y que él podía comunicarla con la parte organizativa”.
López Fadel aceptó de inmediato y “Gustavo” afirmó que se iba a encargar de hacer los arreglos. Y fue así, pues al otro día, “me llamó para pedir que participara de la cobertura de una acción solidaria que iban a realizar”.
Consistía en ubicar a personas, fans de Abel Pintos, que pudieran tener un encuentro con el cantante, sobre todo las que atraviesen algún problema de salud, y que el encuentro con el artista pueda serle de mucho ánimo.
Así las cosas, López Fadel, de la mano de “Gustavo” (Tolava) se sumó a la organización del “Festilerma”. La periodista propuso a su padre como uno de los candidatos o “soñadores” como pasaron a llamar a dichas personas.
Posteriormente, López Fadel, en esa búsqueda, agregó a Agustina, la hija de Pablo Delaloye. Al explicar cómo fue que llegó a este hombre, la periodista confesó que era una de las que entraba gratis al boliche “Elephant”.
Explicó que, a través de un grupo de “whatsapp”, el boliche enviaba una lista “Vip” de chicas que podían entrar sin pagar al local bailable, y que ella estaba en esa lista desde hacía mucho tiempo. Dijo que recordó el caso de una nena que sufrió dos trasplantes, por lo que la rastreó por Internet y se dio con su nombre: Agustina Delaloye.
Al seguir con la búsqueda, dio con el padre de la menor: Pablo Delaloye, quien era el contacto que enviaba la lista de las chicas que podían entrar gratis al boliche “Elephant”. Dijo que al contactarlo, le habló de formar parte de esta acción solidaria, algo que el padre aceptó de inmediato.
Entre tanto, la periodista mantuvo varios encuentros con Tolava en la confitería del MAAC, donde discutieron detalles de cómo sería la cobertura de los reportajes a los soñadores, lo que estaba previsto hacerse antes del festival.
Jarsún y Galleguillo
Con la tarea coordinada, la periodista aportó otro dato interesante. Dijo que acordó con “Gustavo” encontrarse en el barrio San Carlos, en el primer semáforo, donde llegó acompañada de su novio, un joven de Cerrillos.
A la hora acordada, una camioneta negra apareció en el lugar y se estacionó. “Bajó Gustavo, como acompañante, nos saludamos”.
Luego, “bajo también Nacho Jarsún, quien manejaba la camioneta y de los asientos de atrás, bajó la concejal Galleguillo”. Allí, hablaron todos y se pusieron de acuerdo respecto a cómo iban a ser las entrevistas con los “soñadores”.
En la cobertura estuvieron todos, “es decir, Gustavo, Jarsún, Galleguillo, la dicente y el camarógrafo (Juan Pablo Cisneros, de Canal 10)”. Al visitar a la hija de Delaloye, recién conoció al ahora acusado y detenido.
La periodista tiró otro dato comprometedor con respecto a Jarsún, pues a pocos días del festival, mantuvo un encuentro a solas con el intendente de Rosario de Lerma, quien la citó en la Catedral, para regalarle a la periodistas unas entradas “vip” para ver a Abel Pintos.
“Eran las 19.30”. López Fadel estaba en la misma confitería céntrica, cuando recibió un mensaje de Jarsún. “Me escribió el intendente Nacho Jarsún, y me ofreció unas entradas para el festival”.
A cambio, Jarsún le pidió que lo espere en la catedral, a donde llegó y le entregó a López Fadel las entradas. La periodista le comentó que a unos metros, estaba “Gustavo”. En respuesta, el intendente dijo que prefería “que nadie lo vea”.
Fue más allá y que “por favor que no le diga a nadie que le había entregado dos entradas VIP, porque sino la gente le pediría”. Posteriormente, Jarsún, quien tenía contacto con la periodista a través mensajes, le envió a la joven el contacto de la concejal Galleguillo “para arreglar cualquier tema”.
Ni lerda ni perezosa, la periodista se contactó con Galleguillo, quien, al parecer, ya estaba avisada de que debía tratar bien a López Fadel, pues en seguida pidió que le diga quiénes iban a entrar gratis al festival. La reportera, entonces, hizo entrar de favor a sus familiares.
Jarsún ¿dijo la verdad?
La declaración, hasta aquí, de López Fadel dejó un gran interrogante, en particular respecto a las declaraciones públicas de Jarsún, quien había asegurado que no conocía a López Fadel ni a Tolava, pues “jamás se relacionaría con personas que pudieran hacerle daño al intendente, Gustavo Sáenz”.
Jarsún cruzó de esta manera a Mario Delaloye, quien en una conferencia de prensa, afirmó que López Fadel y Tolava trabajaban para Jarsún, lo cual, de la declaración de la periodista, parecer haber mantenido más que un contacto con ambos.
López Fadel dijo que Tolava iba como acompañante en la camioneta de la que se bajó en el barrio San Carlos, y que el conductor era Jarsún. Dijo que estuvieron juntos, y que el propio Tolava le aseguró que era amigo del intendente de Rosario de Lerma.
También la propia periodista contó los encuentros que mantuvo con Jarsún, tanto al recorrer la casa de los soñadores, como el encuentro en la catedral, y que tenía contacto con el intendente por medio de mensajes a través del celular.
EL INTRA