Caballo muerto
10/10/2013. Rincón Literario > Poesía
Manuel J. Costilla hace volar su imaginación sobre la figura del caballo que ya no está.
	Si tu cabeza no estuviera muerta 
	y el aire fuera libre pradería,
	si dijeran los juncos que en la arena 
	esta tu cadáver todavía.
	Para un caballo muerto en el otoño 
	entre senderos y bejuncos claros,
	florece el campo de hojas estrujadas
	y crece un cielo de ojos de caballo.
	Como una mano al costillar de azúcar 
	suelta en el aire pájaros oscuros.
	Si el caballo sintiera, pensaría 
	que lleva niños a los cuatro rumbos.
	La hierba que sus casos aprietan
	se torna mies y por sus ojos crece.
	Y el caballo no sabe que a esa hora 
	hay un caballo que desaparece.
 
                         
                         
                         
                        