Con Nahuel, la policía suma tres muertes con efectivos implicados
12/01/2018. Noticias sobre Justicia > Noticias de Salta
Aunque en dos de los casos, los policías acusados lograron una sentencia de absolución, la Policía nunca pudo esclarecer esos crímenes. Con la muerte de Nahuel, en Solidaridad, la fuerza sintió el golpe y busca rápidamente disminuir el daño colater
Entre el año 2013 y 2018, la policía se vio implicada en tres asesinatos en la vía pública. El primero de ellos ocurrió el 16 de noviembre del 2013, en barrio Sarmiento, en la zona oeste de la ciudad, un sector donde ahora los policías no pueden ingresar sino es escoltados por Infantería.
El otro crimen, ocurrido el 14 de abril de 2015 en La Laguna, en villa 20 de Junio, en la zona este de la ciudad, un lugar que siempre fue complicado para los uniformados, en especial por la alta tasa de actividad delictiva vinculada al tráfico de drogas que se desarrolla en ese sector.
En ambos casos, la justicia investigó e imputó por las muertes a policías, quienesllegado el juicio lograron una sentencia de absolución. Aunque la Policía, como institución, salió a los medios a festejar la liberación de sus hombres, lo cierto es que nunca pudieron resolver ni acercar siquiera una pista de esos dos crímenes, los que aún permanecen impunes.
El triunfo obtenido en estas dos batallas, sin embargo, se vio empañado en los últimos días tras la muerte de Nahuel Salvatierra, en la cual nuevamente aparecen policías implicados directamente con el asesinato del adolescente, de 17 años, muerto de un balazo en la cabeza en la vía pública.
En este caso, la policía como institución actuó muy diferente a los otros dos hechos. Una simple muestra de ello fue advertida por los mismos policías, quienes resaltaron el hecho de que el abogado “saca presos” que tiene la fuerza, haya rechazado asistir al principal imputado por la muerte de Nahuel. “Si Vedia lo abandonó, está en el horno”, dijeron varios compañeros.
Otros señalan que la situación de los dos policías implicados es comprometida, por un lado por las declaraciones de funcionarios del Gobierno de la Provincia, incluido el propio gobernador, Juan Manuel Urtubey, quien le soltó la mano a los dos uniformados al sostener que “la utilización de uniforme no aleja a un efectivo de poder incumplir la ley”.
Previamente, el ministro de Seguridad, Carlos Oliver ya había salido al ruedo eintentó calmar los reclamos, sin embargo, sus declaraciones no alcanzaron, pues a los días la Jefatura, en una reacción inentendible e innecesaria, salió a ganar la zona a los palos en un momento demasiado “sensible”.
La movida, dirigida por el Jefe de la fuerza, comisario, Ángel Silvestre, el mismo que en uno de los casos anteriores festejó públicamente la absolución de cuatro policías, esta vez no cayó bien al ministerio y mucho menos al gobierno, pues el contraataque vecinal no se hizo esperar, y con videos caseros, mostraron el accionar policial y las heridas dejadas por las balas de goma de los policías.
Por detrás, los grupos de izquierda, no desperdiciaron la oportunidad y no sólo se sumaron a los reclamos, sino que se pusieron al frente y llevaron las protestas al casco céntrico, un lugar frágil para las autoridades dada la temporada turística.
Así, y ya con las aguas turbias, el gobernador debió salir personalmente a enfrentar los reclamos y aclarar que los policías no tienen coronitas. No obstante, los vecinos, ya organizados desde la izquierda, parecen decididos a mantener las manifestaciones públicas.
La Policía, en tanto, impulsó la aparición pública de uno de los oficiales implicados en el asesinato de un vecino en barrio Sarmiento para tratar de justificar la muerte de Nahuel, pero fue otro paso en falso, por lo que se replegó rápidamente.
Ahora, trata de tomar la mayor distancia posible del conflicto, para de esa manera aminorar lo más posible el daño colateral que la muerte del Nahuel Salvatierrapueda causar a la institución, la que había logrado cerrar el año 2017 con una buena actuación en materia de prevención.
"Lo sucedido en Solidaridad hizo que el trabajo que veníamos haciendo en esa zona se vea empañado, ahora debemos trabajar para recuperar los lazos entre la ciudadanía y la Policía", declaró Oliver, quien repudió lo sucedido con Salvatierra.
“Entendemos que afecta a la familia de la víctima y su entorno, como a la institución policial. Nos afecta en materia de seguridad, repudiamos lo sucedido porque los efectivos actuaron mal y hoy tienen que estar donde están”, agregó.
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